jueves, 30 de abril de 2020

[El Salto] Trabajadores de residencias de ancianos denuncian despidos por exigir los equipos de protección adecuados

Los dichosa y maldita falta de equipos de protección individual (EPI) empieza a hacer estragos en aquellos trabajadores que se atreven a reclamarlos. Dos casos en un par de residencias del grupo Amavir, entidad que niega lo relatado por parte de los profesionales, salen a la luz para denunciar que su contrato cesó por exigir los equipos necesarios para desempeñar sus funciones protegidos al contagio del coronavirus en dos residencias de la Comunidad de Madrid.

Alba Oranto fue auxiliar sociosanitaria en la residencia de Amavir sita en Villanueva de la Cañada. Se incorporó sustituyendo a una trabajadora con una baja médica indefinida; en total estuvo catorce días en los que presenció un “verdadero descontrol” en el centro residencial. “Existía una zona de aislados, y parecía que la situación estaba controlada hasta que trabajabas con otros ancianos y veías a muchos de ellos con síntomas y sin aislar”, comenta esta trabajadora de 19 años a El Salto. Según sus declaraciones, al principio de su incorporación escuchó de refilón que la residencia no podía proporcionar diferentes EPI cada día, así que habría que pedirlos cada dos jornadas de trabajo.

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miércoles, 29 de abril de 2020

[Público] La incertidumbre del confinamiento en las personas autistas puede hacer que retrocedan sus avances

Dificultades de adaptabilidad, flexibilidad y entendimiento. Estos son los rasgos que las personas con autismo ven incrementados en esta época donde el confinamiento abre y cierra, de forma ordinaria, todo tipo de conversaciones.

El sufrimiento personal en aquellos que padecen trastorno del espectro autista (TEA) puede llegar a hacer perder los avances conseguidos tras meses de terapia, advierten desde la Federación Española de Autismo (Fespau), por lo que es esencial mantener un contacto asiduo con aquellos profesionales con los que ya se trabajaba o buscar ayuda experta en el caso de que no existiera con anterioridad.

Buscar actividades con sentido, aquellas que se hacen con un fin, es clave para llevar el enclaustramiento obligatorio, así como participar de todas aquellas iniciativas que busquen la inclusión de este colectivo en la sociedad, como la obra de teatro, ahora en forma de radioteatro, estrenada el 24 de abril y titulada "También estás aquí".

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domingo, 26 de abril de 2020

[Público] Hacia un escenario como tras el 11-S: así preparan gobiernos y aerolíneas el regreso de los vuelos​

Las medidas que se impondrán en los aeropuertos y en los aviones durante el periodo de transición hasta la vuelta a cierta normalidad tras la emergencia del coronavirus nunca estuvieron tan en el aire. Tras casi mes y medio de confinamiento, desde Aena empiezan a desgranar cómo serán las perspectivas de recuperación del tráfico, que constará de tres fases. Las compañías esperan indicaciones de los organismos competentes para adecuar su infraestructura a esta nueva realidad que algunos ya comparan con lo sucedido tras el 11-S. Así, será necesario llegar a un consenso global tras la aparición de esta nueva amenaza mundial: las pandemias.

El Ministerio de Transportes ha puesto en marcha "varios grupos de trabajo que tienen que ver con escenarios previsibles de la vuelta a la normalidad y sobre todo a la actividad económica y su impacto en los transportes", según confirman fuentes gubernamentales, sin llegar a concretar más para intentar vislumbrar qué sucederá en los próximos meses. Similar es la estrategia seguida por todas las entidades que entran en juego al crear diferentes comisiones orientadas a atajar las obligaciones que las consecuencias del coronavirus impondrán en los viajes por vía aérea.

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jueves, 23 de abril de 2020

[Público] El día a día de los niños ciegos durante el confinamiento los deberes del cole y ejercicios para reforzar su autonomía

"En el instituto nos mandan más tareas que antes, pero aun así aprovecho para reforzar mi autonomía haciendo cosas sencillas, como la cama, buscar mi ropa o poner la mesa". Este es el relato que Natalia hace de su nueva rutina que, con 15 años y una discapacidad visual total, ha experimentado cómo sus hábitos se rompían con el confinamiento obligatorio.

España tiene 7.500 personas con problemas de visión en edad escolar, un estudiantado que ve reforzados sus quehaceres con la ayuda de especialistas que les acompañan y enseñan cómo utilizar todas las herramientas que tienen a su alcance para adaptarse de la mejor forma posible a los ritmos de aquellos que no tienen ningún déficit visual.

Los equipos educativos de la ONCE siguen volcándose en estos menores para que el acceso a los materiales que les proporcionan en sus centros escolares esté adecuado a sus circunstancias. En total, 1.500 profesionales de la organización de ciegos especializados en diferentes áreas acompañan a este sector de la población que, si bien aún sigue padeciendo los estragos de la accesibilidad a los recursos educativos, aprovecha la coyuntura para potenciar otras parcelas de su desarrollo que en una situación normal no tendría tiempo para ejercitar.

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sábado, 18 de abril de 2020

[Público] La pandemia da la puntilla a los comercios de barrio

Pase lo que pase, siempre habrá historias que escapen a los análisis estadísticos, números impersonales que ocultan realidades que, como no puede ser de otra forma, están a pie de calle. Los pequeños comercios que no pueden prestar sus servicios de forma telemática ni abrir sus vetustas puertas al público se ven abocados a una situación dramática que tiene sus antecedentes en la subida de las ventas de grandes cadenas por internet y que ahora se enroca en la incertidumbre tanto laboral como económica propiciada por la emergencia por el coronavirus.

Los negocios del barrio, únicos lugares en el que el cliente puede encontrar una atención cercana y pausada para los ritmos frenéticos que cada vez son más obligatorios a nivel vital, sufren pérdidas a las que los pequeños propietarios no podrán hacer frente si no llegan las ayudas prometidas. España, país de pequeñas empresas y autónomos, deberá poner el foco y especial cuidado en estos establecimientos si no quiere que el turbocapitalismo se adueñe de lo que siempre estuvo ahí y fue transmitido de padres a hijos. Al fin y al cabo, según la Confederación Española de Comercio (CEC), en la que se organizan 450.000 pequeños comerciantes a través de las entidades regionales, este sector crea más de 1.200.000 puestos de trabajo directos.

Sin ninguna previsión, pero con mucha incertidumbre. Así es como se muestran los dueños de locales humildes, que normalmente no cuentan con más de dos asalariados y cotizan en un régimen de autónomos que sigue pasando factura. Marcos González lleva dado de alta como trabajador por cuenta propia la mitad de su vida, es decir, desde los 24 años. Aunque se encuentra ligado al comercio del libro desde que empezó en el mundo laboral, hace 15 años decidió abrir la librería Domiduca y dedicarse a los libros de ocasión, descatalogados y rarezas en una céntrica plaza de Alcalá de Henares.

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jueves, 16 de abril de 2020

[CNT] El individualismo mató al periodismo

Es fácil mejorar tus condiciones laborales cuando no perteneces a la plantilla, no pisas la redacción, tienes que vender piezas que cobras a los tres meses? ¿O cuando trabajas en remoto al ser corresponsal de un medio extranjero o colaborador de más de una docena de periódicos? ¿Y el fotoperiodista que viaja a una zona en guerra sin saber si un medio le respalda, si le ofrecerán 100 euros por un reportaje o si sus instantáneas serán usadas sin su permiso? ¿Y si trabajas haciendo piezas o ilustraciones para revistas culturales por 40 euros? La respuesta es no. Las nuevas condiciones laborales que se imponen en sectores como el de la comunicación, editorial y audiovisual están haciendo que se multipliquen los atropellos, las situaciones de precariedad y la indefensión de las trabajadoras y trabajadores. Sobre todo ante la individualidad que se cronifica.

Décadas después de las históricas huelgas donde periodistas, fotógrafos, administrativos y personal de rotativas se unían para mejorar las condiciones laborales o para denunciar un atropello de la libertad de expresión, son muchos los que piensan que la forma de trabajar en periodismo es y siempre ha sido la actual. Pero no es así. Lejos quedaron la históricas jornadas en las que el mundo de la prensa fue a la huelga de manera unitaria como respuesta al atentado fascista que sufrió El Papus en 1977, y donde los sindicatos con implantación en el sector (CCOO, UGT, USO, CNT y el Sindicato de Trabajadores de Prensa de Barcelona) consiguieron una rápida unidad de acción que paralizó todo el sector de la prensa e incluso tuvo incidencia en RTVE. O el ambiente asambleario y de lucha logrado en el ABC, donde en 2002 la presión de la plantilla logró la readmisión del compañero de CNT Miguel Ángel. Aunque el tirón de la solidaridad siempre se ha dado más en rotativas, talleres y administración, más que en la plantilla de la redacción, todavía resuenan ecos de victorias a nivel laboral. Como la cosechada por los repartidores de prensa de Madrid durante el verano de 2018 al conseguir que sus representantes se sentaran con la empresa para llegar un acuerdo tras diez días consecutivos de paro y movilizaciones.

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[Público] Fridays for Future se manifestará de forma virtual para reivindicar que "nada sea como antes"

El movimiento que a finales del año pasado consiguió aunar a cinco centenares de miles de personas clamando por una justicia climática inmediata y eficaz vuelve a manifestarse, esta vez y a consecuencia del confinamiento, desde el altavoz que les proporcionan las redes sociales.

Un comunicado firmado por Fridays for Future (FFF), Rebelión por el clima y Alianza por el clima, en donde se engloban más de 400 organizaciones y al que cada vez se suscriben más colectivos, plantea aprender de esta crisis sanitaria y repensar el modelo de producción y consumo tan "débil y frágil" que impone el sistema actual.

Convocando la Huelga Mundial por el Clima para el viernes 24 de abril a través de las redes sociales, en conmemoración del Día de la Tierra celebrado un par de jornadas antes, en España han organizado una manifestación con luces y sombras a partir de las 22 horas.

La intención estriba en representar las marchas que el colectivo liderado por Greta Thunberg venía realizando en los últimos meses aderezada con grabaciones de los cánticos que los activistas suelen corear en las mismas. Según el comunicado lanzado de forma global, "este no es momento de interferir en la lucha contra la pandemia ni de detraer recursos de ella y, por eso, esta convocatoria adopta una forma particular, situando su centro en las redes y llamando exclusivamente a la reflexión y a sentar las bases para actuaciones futuras, más concretas y contundentes".

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[Público] El cierre de mercadillos hará perder más de 100 millones de euros mientras los vendedores reclaman más ayudas

El confinamiento a causa del coronavirus ha hecho que, en cierta forma, la vida en los barrios muera un poco más. Los paseos cortos y obligados al supermercado y la farmacia no compiten con los mercadillos de venta ambulante que cada semana ocupaban la calle de siempre para atender a la gente de siempre. Los profesionales del sector se quejan del cese repentino de su actividad, cuando gran parte de los comerciante se dedican a la venta de alimentos, permitida para las grandes cadenas de súper e hipermercados. Un mes de parón dejará estragos que podrían superar los cien millones de euros, según la patronal del sector, y que tan solo en la Comunidad de Madrid afectará a 5.000 vendedores con economías débiles y de subsistencia.

La mayoría de los profesionales que se dedican a la venta ambulante son autónomos o pertenecen a cooperativas de trabajo asociado, por lo que desde la Unión Nacional de Empresas del Comercio Ambulante (Uneca) reclaman medidas eficaces que ayuden a la contingencia de un sector que moviliza a 37.654 empresas, 47.007 personas y 1.732 millones de euros, según los últimos datos publicados al respecto en el INE. "Los mercadillos fueron el primer sector de venta de alimentos que quitaron cuando éramos quienes más garantías sanitarias dábamos a la población al estar al aire libre, no como los supermercados", explica Alberto Chamorro, portavoz del comercio ambulante en la Comunidad de Madrid.

Con 40 años de experiencia en el negocio, Chamorro se dedica a vender frutas y verduras junto a tres trabajadores que están a su cargo. Así explica cómo le llegó la noticia de que le prohibían ejercer su trabajo: "Desde el principio hubo mucha ambigüedad respecto a los mercadillos. Según un primer comunicado podíamos seguir tan normal, pero apenas dos horas después supimos que los habían clausurado. Lo que han hecho con nosotros —continúa el vendedor— ha sido una falta de respeto total hacia el gremio al atacar al más débil".

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domingo, 12 de abril de 2020

[Público] Los republicanos tomarán las redes desde el 13 de abril para exigir la Tercera República: "Ni corona, ni virus"

"La aparición repentina e imprevista del coronavirus ha puesto sobre la mesa de forma brutal y meridiana la auténtica cara del sistema capitalista, un sistema que ha visto cómo su anunciada crisis económica de 2020 se profundiza y acelera a pasos agigantados por la situación de emergencia sanitaria demostrando, una vez más, que el capitalismo es incapaz de garantizar las mínimas condiciones de salud y vida para la población". Así de tajante es el inicio del manifiesto consensuado por decenas de organizaciones de Madrid de cara al 14 de abril, conmemoración de la Segunda República.

Dada la imposibilidad de salir a las calles para recordar la última vez que España pudo elegir a su Jefe del Estado y reclamar una Tercera República, diversos movimientos enfocan su fuerza en las redes sociales. Planteando una campaña que durará desde el lunes 13 hasta el domingo 19 de abril, los colectivos hacen un llamamiento para lucir la bandera tricolor en el balcón, ahora más que nunca: "Ya que empezamos a conocernos en el vecindario a causa del confinamiento por el coronavirus, es el momento de sacar la bandera republicana y ejemplificar que estamos a favor de la reconquista de todos los derechos sociales que hace tiempo venimos perdiendo", dice Willy González, miembro de la comisión permanente de la Federación de Republicanos de la capital.

Desde este colectivo recuerdan con frustración la posibilidad que hubo de acabar con la Monarquía cuando abdicó Juan Carlos, por eso "ahora es el momento de que las clases populares empiecen a tomar conciencia, de aunar todas las mareas y reivindicar sus derechos y su voz por encima de todo", agrega González. Si bien la Gran Vía madrileña ya no se verá inundada por banderas republicanas este 14 de abril de 2020, desde el Espacio Republicano de Madrid animan a todas las personas a compartir en las redes sociales canciones populares de aquella época, el Himno de Riego o alegorías a la República acompañados del hashtag #14AbrilRepúblicaYA.

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[Público] El ejército de voluntarios que acompaña a distancia a los ancianos que viven solos el confinamiento

En un momento en el que las cifras y los datos marcan las decisiones más cortoplacistas debido a las muertes y los contagios de coronavirus, todavía hay realidades que siguen ahí, esta vez mirando a la calle por la ventana. Se estima que en España hay dos millones de personas mayores de 65 años que viven solas, algunas de ellas con serias dificultades para socializar y sentirse incluidas en una sociedad demasiado frenética para alcanzar la mentalidad y la conciencia de aquellos que nacieron en la primera mitad del siglo XX.

El coronavirus es mucho más letal en la tercera edad. Es algo que se repite en todos los países del mundo. Por eso, organizaciones que ya venían realizando acompañamiento a los ancianos han reconfigurado su esquema de acción para intensificar su labor mediante llamadas telefónicas, incluso han surgido algunas iniciativas, tanto a nivel institucional como individual, debido al confinamiento por el coronavirus.

Minutos en compañía es el programa que se ha puesto en marcha en la capital, y que primero se extendió a toda la Comunidad de Madrid y después a Andalucía, aunando la fuerza de Voluntarios por Madrid y Adopta un Abuelo. Teniendo en cuenta que en la capital una de cada cuatro personas mayores vive sola, mediante un número de teléfono gratuito (919 490 111) atienden a todo el que lo necesite. Alberto Cabanes, director de Minutos en Compañía, explica así el procedimiento: "Cualquier persona que llama es atendida por una centralita, aunque todos están trabajando desde casa, y derivamos la llamada a una aplicación móvil que cada voluntario tiene instalada, así se pone en contacto el interesado con su interlocutor. Ninguno sabe el número del otro".

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sábado, 11 de abril de 2020

[El Salto] La Comunidad de Madrid no ofrece ayuda a una mujer de 83 años, con coronavirus y el máximo grado de dependencia

El coronavirus, unido a la externalización de los servicios de la ayuda domiciliaria a la dependencia por parte de la Comunidad de Madrid, está dejando situaciones dramáticas. Antonia Cuevas tiene 83 años, vive en Villalbilla, no puede moverse más que en silla de ruedas y tiene el grado más alto de dependencia. Presumiblemente, debido a su tratamiento de diálisis en el hospital de Alcalá dio positivo por Coronavirus el 25 de marzo. Al día siguiente, las trabajadoras de Domusvi, la empresa subcontratada por la Comunidad y que la ayudaban dos horas diarias se marcharon de su domicilio al enterarse del contagio. Los hijos se pusieron en contacto con la entidad, desde donde les respondieron que no iban a enviar a nadie y que, si querían, denunciaran los hechos.

Cuatro días después del positivo de Cuevas, su marido, de 86 años, fue hospitalizado en Torrejón de Ardoz, presentando síntomas compatibles con la covid-19. Los médicos comunicaron a la familia que debido a su avanzada edad, si las cosas se complicaban no sería ingresado en la UCI, falleciendo el 5 de abril. Mientras tanto, los cinco hermanos se turnan para cuidar de su madre desatendida a la vez que “tanto la Comunidad como la empresa se lavan las manos”, según denuncian.

Fuentes internas de la Consejería de Políticas Sociales y Familia de la Comunidad admiten que este tipo de ayudas se redujeron con la aparición de la pandemia y que uno de los factores para suprimir las visitas domiciliarias radicaba en tener un familiar conviviendo con la persona dependiente. Una información desconocida por la familia afectada, que tras haber llamado al número de información de la Comunidad de Madrid les remitieron al teléfono destinado al coronavirus, desde donde les contestaron que ellos no estaban ahí para solucionar solicitudes como la suya.

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[Público] Descontrol en un albergue para personas sin hogar en Madrid: mascarillas de papel y aislamiento en los vestuarios

Las 150 plazas destinadas a personas sin hogar en el recinto ferial de Madrid pronto se quedaron cortas. Otro centenar y medio de plazas se ofrecieron el 30 de marzo en el céntrico polideportivo Marqués de Samaranch, que también se llenó en pocos días.

La pobreza, una parcela de la realidad que ni con la crisis sanitaria parece importar , es el motivo por el que cientos de personas tienen que acudir a este macroalbergue que está gestionado por la empresa Grupo 5, la cual ha sido denunciada por CNT–Comarcal Sur debido a ciertas negligencias que han encontrado en el funcionamiento del pabellón y que parten, a su entender, de la gran externalización que sufre el sector de la atención social desde los ayuntamientos y comunidades, aunque desde el Ayuntamiento se defienden alegando que "se ha tenido que externalizar este servicio porque era la única forma que había para actuar con la rapidez que exige el momento".

El sindicato se ha visto obligado a intervenir ante Inspección de trabajo a causa de las "irregularidades laborales y abusos producidos desde la primera jornada de trabajo de la plantilla", según reza un comunicado difundido por la Confederación Nacional del Trabajo (CNT).

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lunes, 6 de abril de 2020

[Público] Drogadicción y confinamiento: pasar el mono en cuarentena

El precio de los porros ha subido. La situación de confinamiento también ha hecho efecto en la ley de la oferta y la demanda del comercio ilegal de sustancias estupefacientes. Además, el hecho de que las personas que usan y abusan de las drogas no puedan salir de sus casas ha afectado a los procesos de rehabilitación, que se siguen realizando mediante videollamadas entre los pacientes y los centros de tratamiento, además de que los síndromes de abstinencia provocan, cada vez más, cambios en los ritmos de sueño y de humor en aquellos que no pueden consumir de la misma forma en que lo hacían hace un mes.

El cannabis es una de las drogas ilegales más consumidas en España. Se empieza a hacer uso de ella, de media, poco antes de los 15 años, según la encuesta Estudes del Plan Nacional sobre Drogas del curso 2018/2019, el dato más actualizado. Tal y como afirman desde la Fundación de ayuda contra la drogadicción (FAD), la sintonía general de las llamadas que reciben se enmarca en el sentimiento de "angustia por no poder salir", aunque también puntualizan: "Hemos observado un descenso en el número de llamadas y pensamos que puede ser debido a la falta de intimidad en los hogares, que no permite a las personas hablar con libertad de sus problemas. Hay también un repunte de llamadas de padres y madres de adolescentes pidiendo recursos u orientación sobre cómo manejar la situación con el menor en casa".

La realidad es que los jóvenes que normalmente usaban el cannabis como elemento recreativo y ocioso han visto alterados sus ritmos y "al no tener unos horarios estipulados en relación al instituto, muchos están viviendo esto como si fuera un fin de semana constante, acostándose y levantándose tarde, por ejemplo", según indica Mónica Casado, la coordinadora de ACLAD en Burgos, una asociación de ayuda al drogodependiente que suele trabajar con jóvenes que usan y abusan del alcohol y el cannabis. Esta entidad trabaja en Castilla y León (Burgos, Valladolid, Palencia y León) y desde el 16 de marzo hasta el final de ese mes ha prestado atención social a 267 personas mediante entrevistas telefónicas, el mismo medio utilizado con las 238 que han necesitado atención psicológica y que se han puesto en contacto con ellos.

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domingo, 5 de abril de 2020

[Público] Los manteros se organizan para subsistir mientras las calles están desérticas

El coronavirus también ha parado la vida de los manteros que, obligados a ganarse el pan día a día en las calles, ahora fortalecen el apoyo mutuo que ya venían poniendo en práctica para que a ninguno de ellos le falte ni comida que llevarse a la boca ni dinero para pagar las facturas. Las medidas sociales para paliar la crisis provocada por el coronavirus han dejado fuera a los cientos de personas que se ven obligadas a dedicarse al top manta en las ciudades más transitadas de España. Algunos sindicatos de manteros ya han puesto en marcha cajas de ayuda para que la gente afín al colectivo pueda aportar lo que pueda. Los resultados no se han hecho esperar, en Bizkaia ya han recaudado más de 8.000 euros y en Barcelona han distribuido comida a 300 familias necesitadas.

Lo que han hecho en Madrid es abrir la "caja social" que ya tenía el Sindicato de Manteros de la localidad, y en la que cada uno de ellos aportada cinco euros al mes, para empezar una campaña de donación hacia el colectivo, ya que "muchos de ellos no tienen sus necesidades básicas cubiertas", dice Malick Gueye, el portavoz del sindicato. "El Estado invisibiliza este colectivo, parece que no cuenta para la sociedad, y como son personas que tienen una economía cotidiana, si no salen de su casa no comen, convirtiéndose es uno de los sectores más vulnerables en esta situación", comenta este senagalés de 37 años.

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sábado, 4 de abril de 2020

[Público] Trabajadores sin formación y familiares en zonas prohibidas en una de las mayores residencias de la Comunidad de Madrid

El incumplimiento de ciertos protocolos en torno al coronavirus en las residencias de ancianos de la Comunidad de Madrid está haciendo que las medidas tomadas no sean tan eficaces como lo esperado. Es el caso de la Francisco de Vitoria, en Alcalá de Henares y una de las más grandes de la región, que sigue sin cumplir con algunos protocolos mínimos, según denuncian personal del centro y sindicatos.

CSIF ya ha contactado con hasta siete residencias de la Comunidad, entre las que se encuentra la de Alcalá, por irregularidades relativas a la desinfección de los equipos de protección utilizados por los profesionales sanitarios, el seguimiento de los protocolos de actuación y la falta de formación e información tanto a las plantillas como a sus representantes del estado de la situación. El escrito también recoge ciertas propuestas de mejora para intentar revertir la situación, como que ningún trabajador vuelva a prestar sus servicios en el centro sociosanitario hasta que una prueba negativa de coronavirus atestigüe que no puede contagiar a los usuarios y habilitar zonas de desinfección y custodia de los equipos de protección individual (EPI), unas medidas que actualmente no se están llevando a cabo, según la central sindical.

Javier Prieto, el responsable de políticas sociales del CSIF en la Comunidad de Madrid denuncia que en la residencia alcalaína "se han gestionado fatal los aislamientos porque no se ha previsto bien la incidencia, y en lugar de intentar aislar a la residencia en su conjunto han ido haciéndolo por módulos, únicamente cuando el usuario presentaba síntomas, es decir, cuando podía haber diseminado el virus durante días", asegura a Público antes de afirmar que el desabastecimiento de material durante los primeros días de la pandemia se está revirtiendo.

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miércoles, 1 de abril de 2020

[Público] Trabajadores y familiares denuncian el "oscurantismo" de la Comunidad de Madrid en torno a las residencias

Si detrás de cada cifra de fallecimientos por coronavirus hay una vida, la situación se agrava mucho más cuando ni siquiera existen datos fiables y actualizados al respecto. Es lo que sucede en las residencias de la Comunidad de Madrid, en donde se desconoce si se han medicalizado, y el último dato hecho público respecto a los decesos es del 26 de marzo: 1.065 ancianos habían muerto desde inicios de mes pero, desde la Consejería de Políticas Sociales, en donde recaían las competencias hasta entonces en materia de residencias, ni siquiera explicitaban la causa de los fallecimientos.

Tanto familiares de los residentes como trabajadores de los centros denuncian "oscurantismo" en la gestión de los mismos, además de que desde un primer momento han faltado equipos de protección individual (EPI), lo que ha podido repercutir en el elevado número de contagios, y muertes, en los geriátricos. Tanto es así que desde Pladigmare, una asociación que aglutina a familiares de residentes y trabajadores en residencias de mayores, han enviado un escrito a la Fiscalía buscando la apertura de una investigación en la que se atestiguan, fundamentalmente, dos órdenes ministeriales de Sanidad.

Miguel Ángel Vázquez, el presidente de la asociación, señala que en todas las residencias debe existir, desde el 21 de marzo, una clasificación de los pacientes en cuatro grados en los que se aglutinen de mayor a menor posibilidad de haber entrado en contacto con una persona contagiada de coronavirus; algo que, como mínimo, no se está produciendo en más de cinco residencias de la Comunidad de Madrid. Falta de precauciones como esta y el desbordamiento de las plantillas es lo que han eclosionado en que la Consejería de Sanidad, organismo que en estos momentos se encarga de gestionar estos centros, haya tomado el control de ocho residencias privadas de la región.

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